Autor: Prof. Veudi Vivas Valdez, Cronista Vitalicio de Cozumel.
Nacido en la Sultana de Oriente a fines del siglo XIX, llegó a Cozumel como escribiente del Juzgado de Paz, a principios de los años 30 y a mediados de la década de los 70 partió definitivamente para no volver a su querida Isla.
Sus padres fueron el Prof. Baltazar Rosado Alcocer y Doña Justa Pastora Iturralde Navarrete y sus abuelos paternos, Don Remigio Rosado y Doña Juana Alcocer Rivas y maternos, José María Iturralde y Severiana Navarrete.
Nació el 14 de febrero de 1893 y de acuerdo a su acta de nacimiento fue registrado como Gonzalo Valentín, aunque el siempre manifestó llamarse Gonzalo de Jesús.
Su estancia en Cozumel, fue de poco menos 40 años, en los que su participación en la vida social, política y administrativa de nuestra ciudad no solo fue significativa, sino que dejó una huella permanente, digna de recordar.
Como Juez de Paz se caracterizó por ser conciliador, era común que los diferendos terminaran con un apretón de manos entre demandante y demandado, también era notorio que antes de divorciar a una pareja, hiciera hasta lo imposible por lograr la reconciliación o cuando menos que los términos de la separación no fueran violentos.
Su participación en los programas cívicos y culturales siempre fue considerada permanentemente como algo fijo e ineludible, convirtiéndose en el orador oficial de todo evento en lo que daba la nota cultural e histórica, con su inconfundible estilo de orador, siempre con gran patriotismo.
No escatimó esfuerzo para incluso de su propio peculio promover la cultura a través de su periódico semanal “Cultura Derecho y Libertad”.
Sus “Sábados Culturales” constituían un encuentro con el folklore nacional, el calendario cívico y el romanticismo de la época.
En 1939, fue activo participante en la fundación del primer jardín de niños “Primavera” y de la biblioteca pública “Amado Nervo”.
Su breve historia de Cozumel, publicada en 1949, es un referente obligado para los estudiosos del pasado de nuestro pueblo. Cinco años después formó parte del Comité que logró la incorporación de la educación Secundaria en Cozumel, al inaugurarse en 1954 las Escuela Secundaria por Cooperación “Gabino Barreda”, de la cuál fue profesor de Civismo y sin sueldo.
Toda una época fue el presentador oficial de las jóvenes quinceañeras, a las que dedicaba lecciones de urbanidad y moral, regalándoles de recuerdo un cuadernillo elaborado por él, que contenía una dedicatoria, un verso o una frase alusiva a la edad de las ilusiones.
Por último, cuando cambió su residencia a la ciudad de México, muchos extrañaron sus populares mañanitas dedicadas a las madres, al amanecer de todo 10 de mayo, cuando acompañado por un guitarrista y un acordeón con ronca voz cantaba a las madres, recorriendo la población hasta el amanecer.
Don Gon, el último Cupul como se auto nombraba dejó profunda huella de su estancia en nuestro pueblo, Cozumel, aún está en deuda con él.
14 de febrero de 2022